El colorido paseo fugaz de Miranda!
Miranda! se presentó el pasado viernes 20 en Asunción donde recorrió sus grandes éxitos, actuando sobre una carroza imaginaria que arrastró una colorida guirnalda de emociones y recuerdos.
Por Orlando Salerno
El dúo pop argentino regresó a nuestra ciudad en el marco de los 18 años del Paseo Carmelitas, en cuyo estacionamiento la banda actuó de costado a la Avenida España, en cuyas veredas se generó una longeva fila para ingresar al predio y disfrutar de un show breve, pero contundente.
El paso de Ale Sergi y Juliana Gattas fue maratónico, al más estilo ramonero, ya que los mismos casi no respiraron entre una canción y otra, e inclusive, contaban con su escaparate de prendas que iban intercalando de colores y modelos, por tandas de su set.
El grupo continúa celebrando más de 20 años de su debut discográfico “Es Mentira” (2001), por lo que no faltaron los invitados virtuales en la noche, que iban desde Andrés Calamaro, Chano Moreno, Emilia Mernes, Lali Espósito, María Becerra y FMK, entre otros, quienes se mostraron en las pantallas de la tarima, acompañando con sus voces a hitazos como: “Tu Respectivo Alguien”, “Mentía”, “Uno los dos”, “Yo te diré” y “Perfecta”, respectivamente.
Pero los momentos más lujosos se vivieron con los dos fundadores de Miranda! en la intimidad, a través de temas como: “Prisionero”, “Yo te diré” y “Enamorada”, que provocó un emotivo pogo de chicas frente al escenario, en una calurosa noche asuncena que reunió a jóvenes adultos que cuentan con diferentes viajes personales con Miranda! y ese viernes estallaron todos juntos.
Recordemos que Miranda! lideró ese nuevo pop argentino, como herederos de Federico Moura y protegidos de Gustavo Cerati, que durante y después de la crisis del 2001, aparecieron en escena junto a otros modernos como: Entre Ríos, Los Látigos, Capri y Azafata, cuya baterista Ludovica Morell, actualmente forma parte de Miranda!
No es de sorprender que los artistas de la actualidad sigan encontrando en estas canciones una fuente de inspiración musical y espiritual, ya que Miranda! fue sin dudas uno de los actos más trasgresores de su momento, razón por la que hoy ya disfrutan de un merecido trato y respeto como leyendas, sobre todo en nuestro país.
Y fue así que se despidieron, luego de interpretar canciones de forma corrida, Ale y Juli finalmente tomaron el micrófono para dedicar unas lindas palabras a todos los presentes, antes de entonar su primer gran himno latinoamericano, la canción “Don” de 2004, para coronar el baile y retornar a la carroza, cuyo hechizo duró casi uno hora y emitió sonidos de fantasía.
Fotos: Nathalia Aguilar | @hola.soy.nath
